En un contexto donde la justicia social se construye desde lo local, el papel de los Servidores de la Nación se vuelve esencial. Son agentes de cambio que, con su trabajo constante, acercan oportunidades, derechos y esperanza a miles de familias coahuilenses.

El compromiso diario de los Servidores de la Nación en Coahuila se refleja en cada rincón del estado, donde, con cercanía, empatía y vocación social, llevan los programas prioritarios del Gobierno de México directamente a las familias. Esta labor territorial no solo implica caminar casa por casa, sino también tejer lazos de confianza con la población y garantizar que nadie se quede atrás. En jornadas que inician desde temprano y muchas veces se extienden hasta el anochecer, los Servidores de la Nación contribuyen a hacer realidad el principio de justicia social que impulsa el Gobierno de México.

Desde la Delegación de Programas para el Bienestar en Coahuila, se reconoce y valora profundamente la entrega y compromiso del equipo de Servidores de la Nación. El delegado Américo Villarreal Santiago ha expresado su respaldo total a cada uno de ellos, subrayando que “son el rostro humano del bienestar y la primera línea de contacto entre el Estado y el pueblo”.

“Su labor es fundamental para seguir avanzando en la transformación de nuestro país. Gracias a ustedes, los programas sociales llegan de manera directa, sin intermediarios y con total transparencia”, destacó Villarreal Santiago.

Los Servidores de la Nación son un pilar esencial para fortalecer la confianza ciudadana y garantizar que cada derecho social se convierta en una realidad.

Actualmente se han convertido en apoyo esencial, sobre todo para los servidores de salud en el programa Salud Casa por Casa, tal es el caso del Servidor Martin Garcia Rodriguez, que durante su recorrido diario visitó, un domicilio donde encontró a una pareja de adultos mayores que, hasta ese momento, no recibía ningún tipo de apoyo de los programas para el bienestar. Al identificar esta situación, el servidor actuó de inmediato, iniciando el proceso para incorporarlos a la Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores y al programa de Salud Casa por Casa, garantizando así el acceso a sus derechos.

Este caso es un ejemplo claro de que los Servidores de la Nación son mucho más que un enlace operativo: son un puente humano entre el Gobierno de México y el pueblo, con un compromiso real con quienes más lo necesitan.