Con más de 600 contagios en Texas y casos activos en Durango, el sarampión acecha por todos lados. Coahuila responde con vacunación, vigilancia… y más de un ojo puesto en la frontera.

El Gobierno de Coahuila prendió las alarmas ante la combinación de factores peligrosos: un brote de sarampión en Texas —con 626 casos confirmados hasta abril— y contagios activos en el municipio de Nuevo Ideal, Durango, región estrechamente conectada con La Laguna coahuilense. El cerco sanitario se refuerza, especialmente en las regiones fronterizas y metropolitanas.

En Piedras Negras, el jefe de la Jurisdicción Sanitaria 01, Julio Garibaldi Zapatero, informó sobre la intensificación de campañas de vacunación, sobre todo para quienes planean viajar a EE.UU. En paralelo, en La Laguna se estableció un operativo especial de vigilancia epidemiológica ante el riesgo real de propagación desde municipios como Gómez Palacio o Lerdo hacia Torreón y Matamoros.

La mayoría de los casos recientes en Texas se dieron entre adolescentes no vacunados. En Durango, los contagios se confirmaron en menores de edad sin esquema completo. Coahuila está respondiendo con la activación de módulos itinerantes y revisión escolar, como parte de un escudo sanitario preventivo.

El virus no respeta fronteras ni mapas políticos. Pero acá en el norte, entre vacunas y vigilancia, nos vamos a encargar de que el sarampión se quede sin pasaporte.