En mercados y colonias de Torreón, la conversación gira en torno al clima: la Comisión Nacional del Agua (Conagua) lanzó una alerta por temperaturas extremas que superarán los 40 grados, combinadas con lluvias aisladas en la Comarca Lagunera. La advertencia llega justo en una semana donde se prevé un aumento en los casos de golpe de calor y fallas en servicios básicos.

Primero, el organismo informó que se espera cielo mayormente despejado en las mañanas, pero con chubascos por la tarde y noche. Después, Protección Civil municipal recomendó hidratarse constantemente, evitar la exposición directa al sol y mantenerse atentos a las descargas eléctricas asociadas a las lluvias. Hasta ahora se ha comprobado que ya se han registrado cortes parciales de energía y saturación en centros de salud por casos leves de deshidratación; todavía no está claro si habrá operativos extraordinarios para atender colonias vulnerables.

El contraste es evidente: mientras Conagua advierte sobre la intensidad de este fenómeno, vecinos de Torreón señalan que la infraestructura urbana no resiste tormentas súbitas, y que los encharcamientos y cortes de agua se vuelven inevitables. Autoridades municipales aseguran que se reforzarán brigadas de limpieza de alcantarillas y que se dispondrá de albergues temporales en caso de emergencia.

El clima extremo en la Laguna no es novedad, pero sí es un recordatorio de la fragilidad de la ciudad ante la naturaleza. Torreón necesita protocolos públicos, reportes claros y participación comunitaria para enfrentar un verano cada vez más intenso.