Movimiento Ciudadano anunció que no irá en alianza para las elecciones de 2026 en Coahuila. Presentará candidatos propios para el Congreso local, apostando por una ruta independiente que busca capitalizar el descontento ciudadano y diferenciarse de los bloques tradicionales.

La dirigencia estatal de Movimiento Ciudadano en Coahuila puso fin a las especulaciones y confirmó lo que ya se veía venir: no habrá alianzas ni coaliciones rumbo al 2026. El partido competirá en solitario por las diputaciones locales, apostando por una oferta distinta a la del PRI, el PAN, Morena y sus respectivos aliados.

Con este movimiento, MC busca reforzar su narrativa de “tercera vía”, una alternativa joven y sin compromisos con las viejas estructuras. Aunque su presencia en el Congreso actual es mínima, aseguran que el crecimiento a nivel nacional y el hartazgo político pueden jugar a su favor, especialmente entre el electorado indeciso.

El dirigente local subrayó que el partido ya trabaja en la selección de perfiles ciudadanos, con propuestas frescas y énfasis en causas como movilidad, medio ambiente, salud mental y combate a la corrupción. Además, anticipó que iniciarán una campaña territorial intensa, especialmente en zonas urbanas y de clase media, donde han detectado mayor afinidad con su mensaje.

En un panorama político dominado por bloques polarizados, el anuncio de MC marca una apuesta riesgosa, pero también estratégica: buscar capitalizar el desencanto sin depender de estructuras ajenas. La gran pregunta es si Coahuila está listo para abrir la puerta a una opción verdaderamente independiente.

Romper con lo establecido no siempre asegura el triunfo, pero sí garantiza identidad. Movimiento Ciudadano elige el camino difícil: competir sin muletas, sin pactos y con sus propias cartas. Si logra conectar con la gente más allá del discurso, podría convertirse en la sorpresa del 2026.